Unas 300 personas se han concentrado este mediodía a las puertas del Ayuntamiento de Huesca para guardar un minuto de silencio, en repulsa por la muerte de Miguel Ángel González y David Pérez los dos guardias civiles arrollados por una narcolancha en Barbate.
Las concentraciones que en la provincia de Huesca también se han desarrollado en Jaca, Barbastro, Monzón o Fraga, habían sido convocadas por la Federación Española de Municipios y Provincias.
La alcaldesa Lorena Orduna agradecía a los oscenses su participación y el apoyo a los Cuerpos de Seguridad, “que son quienes nos protegen cada día”. Por su parte, el teniente coronel José Enrique Cordobés, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Huesca, agradecía también la respuesta de los oscenses, y aseguraba que seguirán trabajando para garantizar la seguridad de los ciudadanos.