El Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) ha iniciado el proceso de transformación de la atención en los centros residenciales, basado en el modelo de atención centrado en las personas. Este miércoles ha tenido lugar la primera sesión de formación, un primer paso que culminará con la creación de 20 unidades de convivencia en los nueve centros del IASS.
La gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales, Noelia Carbó, ha explicado que la primera de estas unidades en ser inaugurada será la de la residencia Romareda de Zaragoza, cuyas obras están más avanzadas. Además, en el primer trimestre de 2023 también estarán listas las del “Hogar Doz” de Tarazona, la residencia Ciudad de Huesca, la de Albarracín y el centro asistencial de Calatayud. El resto de proyectos están ya en licitación. El presupuesto total es de 12,5 millones de euros.
Espacios hogareños
El jefe de la sección de Calidad de Centros y Servicios del IASS, Mariano Fago, ha detallado cómo funcionarán estas nuevas unidades de convivencia. Se trata de espacios más hogareños, donde vivirá un grupo reducido de entre 9 y 15 personas, normalmente en habitaciones individuales, para que puedan continuar con las actividades que realizaban en su casa, antes de ir a una residencia. Ese nuevo modelo se basa en el buen trato personal y la autonomía de los residentes.
Para llevar a cabo todo el proceso de evaluación, implantación del nuevo modelo y formación de los 1.500 trabajadores de los centros del IASS, se contará con la colaboración de la Fundación Matia. La codirectora de esta Fundación, Erkuden Aldaz, ha asegurado que el cambio de modelo es posible, aunque suponga revisar muchas de las cosas que se venían haciendo hasta ahora y también supone un reconocimiento al modelo de atención actual.