La Parroquia del Perpetuo Socorro, ubicada en avenida Goya de Zaragoza, se ha incorporado este año como refugio climático. Víctor Ballesteros, párroco de la iglesia, explica que la idea nace de la necesidad de los feligreses para refugiarse del calor. El sacerdote aclara que la iglesia permanece abierta para todas las personas que deseen alejarse de las altas temperatura, incluido el horario de misa.
Tal como explica el párroco, la estructura de la parroquia favorece el aislamiento térmico. Los anchos muros y la climatización permiten que se mantenga una temperatura entre 26 y 27 grados a lo largo del día. El aire acondicionado funciona durante la eucaristía, a las 12:30 y a las 20:00. “Es un lugar en el que poder refugiarse del calor y también de alivio espiritual”, asegura Víctor Ballesteros.
La ciudad de Zaragoza cuenta con 55 centros municipales que forman parte de la red de refugios climáticos. Los centros cívicos, los centros de mayores, los Depósitos del Pignatelli o el albergue, son algunos de los lugares abiertos para protegerse de las altas temperaturas. El párroco de la iglesia del Perpetuo Socorro explica que establecer como refugio una parroquia es una idea original que podría ponerse en marcha en otras iglesias de Zaragoza.