Los vecinos de la calle Pignatelli están hartos. El edificio ocupado en el número 67 de esta calle acumula numerosos incidentes: peleas, okupas encaramados en el tejado, lanzando cuchillos y tejas, tráfico de estupefacientes e incendios. El último se declaró este sábado en el rellano, donde se acumulaba gran cantidad de basura.
Tras este nuevo sobresalto, el Ayuntamiento ha efectuado una inspección sobre las condiciones de seguridad y salubridad. Las conclusiones serán elevadas a la Fiscalía. Además, se ha solicitado una reunión donde esté presente la Delegación del Gobierno, el Consistorio, la Dirección General de Vivienda de la DGA y la Junta de Distrito del Casco Histórico.
Uno de los vecinos de la zona, Oscar, critica al Ayuntamiento por no dar una una solución urbanística firme y pase la pelota a otras administraciones. El presidente de la Junta de Distrito, Alfonso Mendoza, asegura que éste no es el sentir de la mayoría de los vecinos y defiende que la Delegación del Gobierno debe implicarse porque tiene las competencias en materia de seguridad ciudadana.
