En el último año, la electricidad, el gas y otros combustibles han aumentado un 82% en nuestro territorio. El IPC ha crecido un 8% en el sector de los alimentos. Precisamente de la cesta de la compra destaca que el precio del aceite ha crecido un 35% en el último año, un 15% el ternasco, un 12% el pescado y los huevos, un 11% la leche o un 10% los cereales y la fruta. En estos doce meses, sólo hay un alimento que es más barato: la carne de cerdo. Los aragoneses reconocen que la subida de los precios les está afectando a los bolsillos y que habrá que apretarse el cinturón.
La inflación se ha disparado, pero parece que no va a frenar las ganas de la gente por disfrutar de la Semana Santa. Y es que después de dos años marcados por la pandemia, es hora de viajar.