Los precios crecieron el año pasado en Aragón un 2,5%. En los últimos doce meses, la mayor subida se ha producido en la alimentación con un 6%, seguido de restaurantes y hoteles con un 4,8% y transporte con un 3,5%. En cambio, la inflación bajó en vivienda, agua, electricidad y gas con una caída del 6,1%. Por provincias, Huesca fue la más inflacionista con un aumento del IPC del 2,9%, después se sitúa Teruel con un 2,7% y Zaragoza con un 2,4%.
Si va a hacer la compra ya sabrá que el producto que más se ha encarecido en el último año es el aceite con una subida del 33% en Aragón. También destacan las subidas de la carne de cerdo con un 17%, el ternasco un 11%, las verduras un 8% y la fruta un 7%.
El Gobierno aragonés considera que los datos son buenos y confía en que los precios se sigan moderando, aunque reconoce que las tensiones geopolíticas generan mucha incertidumbre de cara a 2024. El director general de Política Económica, Javier Martínez, recuerda que la inflación deseable sería del 2% y lamenta que la cesta de la compra se encarece muy por encima de esa cifra.
"Son buenos datos, pero hay que seguir revisándolos. Igual que cuando subió no lo hizo de un día para otro, estas bajadas también irán acompañadas de pequeños repuntes. La peor parte es los alimentos, que siguen subiendo de forma importante, y eso afecta al día a día de las familias", ha señalado Martínez.
