Son más de dos años en los que el Covid-19 entró en nuestras vidas y aunque poco a poco se deja de hablar de su incidencia y de los niveles de contagio, en la última semana, la incidencia en Aragón ha subido 15 puntos y se han registrado cuatro muertes debido a esta enfermedad. Se está viendo un repunte en el mes de otoño. Las investigaciones continúan y lo hacen para conocer más sobre su propagación y para buscar un tratamiento.
Algunas de estas líneas de investigación las desarrollan el equipo que dirige la investigadora y viróloga aragonesa Nerea Irigoyen en la Universidad de Cambridge. Lleva más de diez años trabajando con el Covid-19 y una de esas líneas de investigación ha concluido que se puede atacar la infección por coronavirus no a través del propio virus sino a través de las células infectadas.
De esta manera y combinando varios fármacos, se reduce la propagación del Covid-19 e incluso puede convertirse en antivirales de amplio espectro. Irigoyen asegura que precisamente por la investigación que estaban desarrollando sobre la búsqueda de fármacos contra el coronavirus, pudieron abrir en pandemia el laboratorio en el que trabaja.
La pandemia ayudó a que el sector de la investigación se uniera para hacer frente a un mal común y buscar soluciones. Ahora los profesionales están volviendo a sus líneas de investigación, necesarias para conseguir tratamientos y arrojar luz sobre diferentes temas.