Jaca celebra hoy su fiesta grande del Primer Viernes de Mayo, Fiesta de Interés Turístico Nacional. Los jacetanos están disfrutando de una soleada jornada para conmemorar la victoria de las tropas del Conde Aznar Galindez contra los musulmanes en el año 758. Hombres y mujeres evitaron la invasión de la ciudad hace 1264 años y desde hace siglos se celebra el triunfo con pasacalles, comidas populares y una gran cantidad de actos.
Estos han comenzado con el almuerzo en la explanada situada junto a la ermita de la Victoria, a donde se va en romería, pero también en los bares de la ciudad, completos desde hace días por las reservas. A las 12 horas ha comenzado el desfile desde la avenida Regimiento de Galicia en el que han participado cerca de 1.000 personas perfectamente ataviadas para la ocasión.
La comitiva ha estado encabezada por la bandera de la Hermandad del Primer Viernes de Mayo, seguida por el Conde Aznar, figura que encarna Miguel Carasol y de la que se despide este año. Este ha ido acompañado como es habitual, de la caballería y el cortejo histórico. Las escuadras, los labradores con vistosos sombreros de flores, y los artesanos han seguido a la entrada triunfal del Conde Aznar; después las artesanas y labradoras.
Entre unos y otros no han faltado las descargas de trabucos en las escalinatas del Paseo de la Constitución y en la Catedral. En esta última ha tenido un protagonismo especial la Síndico, la figura más importante que representa a la ciudad y porta la bandera de Jaca en el desfile y que en esta ocasión ha sido la concejala del grupo municipal Aragoneses Lucía Guillén.
El desfile ha finalizado con el canto del himno del Primer Viernes de Mayo, el momento más intenso y emotivo de la mañana, que los vecinos de Jaca esperan durante todo el año. En esta ocasión, la principal novedad ha sido la colocación de dos pantallas gigantes, en las plazas de la Catedral y Marqués de la Cadena, para que el numeroso público que se congrega en estos puntos pudiera seguir el desfile y el canto del himno.