Astún es el primer centro invernal del Pirineo que abre sus puertas, mañana lo hará Candanchú y las estaciones de Aramón a partir del viernes 3. Astún, que el año pasado fue la única estación que estuvo en funcionamiento, ha abierto esta mañana con 19 kilómetros de pistas, 3 remontes y espesores de hasta metro y medio en las cotas más altas. De aquí al viernes la estación irá ampliando su dominio esquiable con la idea de que el fin de semana todas las pistas y remontes estén disponibles, tal y como explicaba el subdirector general de la estación, Andrés Pita.
Pita, se muestra optimista con el inicio de la temporada. Reconoce que la de hoy es una jornada de baja afluencia pero que sirve para el rodaje y la puesta a punto de la estación de cara a que todo esté listo el fin de semana.
Por su parte, Candanchú abrirá este jueves, 2 de diciembre, dos telesillas, seis telesquís y una cinta. Astún y Candanchú reeditan este año su unión comercial 100k, con venta de abonos conjuntos y una unión que suma 100 kilómetros esquiables, 102 pistas, 14 itinerarios y 40 remontes con una capacidad de transporte de 46.000 personas por hora.
En lo que respecta a Aramón, se inauguran importantes novedades tras una inversión de más de 20 millones de euros, la mayor en los últimos 15 años. En Cerler estrenan el nuevo telesilla Castanesa, un remonte de seis plazas que abre una nueva zona esquiable. De este modo, en la estación sumarán cuatro pistas: una azul, dos rojas y una negra. Y por último, Formigal-Panticosa inaugurará dos sillas, Lanuza y Pico Royo, ambas en el Valle de Izas. El telesilla Pico Royo, además, da acceso a nuevas pistas, una roja y una negra, dos pistas para los más expertos que nacen en el collado de Lapazuso, una nueva zona esquiable.
