Según los datos del Gobierno aragonés, en lo que llevamos de año, se han reducido en 1.885 los aragoneses con demoras de más de 180 días para ser operados, es decir, el descenso es del 22%. Por especialidades, las mayores esperas se concentran en Traumatología, Oftalmología y Cirugía General y del Aparato Digestivo. Para seguir reduciendo estas cifras, el Departamento de Sanidad apuesta por mejorar la programación de las sesiones quirúrgicas en jornada ordinaria de mañana, optimizar las operaciones durante el verano y aprovechar los quirófanos de la MAZ y el hospital de la Defensa. El consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, confía en que el ritmo de trabajo se mantenga durante el mes de agosto.
Este verano, el hospital Miguel Servet de Zaragoza realizará un 10% más de intervenciones quirúrgicas respecto al mismo periodo del año anterior. En el Clínico, esa cifra es un 8% superior. En el Provincial de la capital aragonesa, se ha duplicado la actividad en verano en intervenciones de cataratas con dos sesiones diarias. Incluso han asumido, junto al Clínico, pacientes del hospital de Alcañiz.
Fidelización de los MIR
Los sindicatos médicos aseguran que el plan de fidelización del Gobierno aragonés no está siendo eficaz para garantizar la presencia de médicos suficientes en el medio rural. Aunque 52 de los MIR de Medicina de Familia de último año se incorporaron voluntariamente para reforzar la Atención Primaria durante el verano, la mayoría está trabajando en Zaragoza capital. Mientras, los pequeños consultorios han tenido que volver a recortar sus horarios.
Es lo que denuncia la secretaria general de CESM Aragón, Mercedes Ortín, quien advierte de que, para atajar ese déficit de profesionales, el Ejecutivo tiene contratados a, al menos, un centenar de médicos con el título de grado, pero que no han realizado el MIR, algo que solo es legal en la sanidad privada, y que pone en riesgo la calidad de la asistencia.
El consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, cree que el plan de fidelización de los MIR no es un fracaso porque se han adherido 52 residentes en Atención Primaria y 54 en los hospitales. Bancalero reconoce que le hubiera gustado contar con más profesionales MIR, pero culpa al Ministerio por las limitaciones que ha impuesto para que los profesionales ejerzan esa labor.