Nos vamos a ubicar en Santiago y en su catedral. Ahí vamos a conocer a Laura que tiene una misión: robar los huesos del apóstol Santiago y tiene siete días para encontrar a su novio secuestrado. Esta es la línea en la que comienza “La ladrona de huesos”, la última novela de Manel Loureiro.
Se trata de su segundo thriller, un género en el que se siente cómodo y que gusta a sus lectores. En el que no sólo hay investigación y misterio sino también sentimiento. Esta novela surgió hace tiempo, cuando Manel Loureiro vivía en Santiago y acortaba camino cruzando por la catedral. En esos momentos de soledad asegura que se preguntaba si alguien podría robar cualquier elemento. Algo que sucedió años después con el robo del Códice Calixtino.
El argumento de “La ladrona de huesos” trascurre también por escenarios como México o Suiza e incluso entran en juego espías rusos, marcado por la actualidad sin quererlo. Si a todo esto se une el misterio de reliquias como las de los huesos de Santiago o la aventura del descubrimiento que realiza Laura, tenemos los ingredientes de esta novela.