Aragón ha sumado en las últimas horas 379 casos de coronavirus, una cifra que no se alcanzaba desde hace casi dos meses. Los contagios se concentran, sobre todo, en la provincia de Zaragoza, en la capital pero también en ciudades como Tarazona, que va a estar confinada hasta el 9 de mayo, María de Huerva, Tauste o La Almunia.
La portavoz del Gobierno aragonés, Mayte Pérez, cree que es pronto para hablar de una quinta ola, pero reconoce que están preocupados por el incremento de los contagios. Por ahora, no contempla nuevas restricciones, aunque tampoco las descarta, lógicamente, si la situación sigue empeorando. Pérez ha dejado claro, además, que aunque el Estado de Alarma concluya en mayo, Aragón podrá seguir aplicando confinamientos y restricciones de horarios y aforos. La única medida para la que ya no tendrá competencias será el toque de queda.
Pérez también ha opinado sobre la decisión de Castilla y León de suspender la vacunación con AstraZéneca, por su posible relación con casos de trombosis. Considera que es irresponsable tomar este tipo de medidas de forma unilateral y hace un llamamiento a la unidad territorial.