Las instalaciones, que se encontraban en el antiguo convento de los Capuchinos, cuentan con una superficie de 90 metros cuadrados útiles y un espacio diáfano que “aporta a los servicios sociales municipales la dignidad que merecen con unas oficinas modernas”. La ubicación anterior se va a rehabilitar para viviendas sociales, tal y como explica el concejal de acción social Carlos Reyes.
En el año 2020 los servicios sociales de base atendieron más de 1.500 consultas, una cifra que descendió en 2021. Los motivos de consulta van desde la ayuda a domicilio, la atención a la dependencia, apoyo familiar, atención a la población extranjera o la actuación frente a la violencia machista, entre otros servicios que presta la comarca.
Por parte del Ayuntamiento, los trámites que se pueden realizar en esta oficina son la gestión de ayudas como las que corresponden, por ejemplo, a las personas con celiaquía, familias numerosas o monoparentales y otras ayudas para los servicios públicos. Además, este es el centro de referencia para las relaciones con las entidades sociales.