La consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha insistido en las Cortes de Aragón en que todos los municipios van a salir ganando con el nuevo modelo, que elimina ambulancias convencionales, siguiendo la normativa europea, pero refuerza los vehículos de soporte vital básico y avanzado, con más profesionales.
La diputada del PP, Ana Marín, le ha recordado el descontento de muchos alcaldes, de todos los colores políticos, con el pliego que se está elaborando. Repollés le ha respondido que ese malestar es producto de las mentiras difundidas por los populares.
Críticas de Podemos y Chunta
Aunque de forma más suave, la consejera de Sanidad también se está encontrando la oposición de algunos de sus socios de Gobierno. Tanto Chunta Aragonesista como Podemos creen que el servicio de ambulancias debería internalizarse para evitar la precarización de las plantillas y asegurar la calidad de la prestación.
La diputada de la formación morada, Itxaso Cabrera, lamenta que se hayan producido fallos en la comunicación del Gobierno con el territorio y le recuerda a la consejera que Baleares y La Rioja ya han internalizado el servicio. Repollés asegura que analizaron esa posibilidad, pero no es viable mientras el Estado no autorice la inclusión en la sanidad pública de esos perfiles profesionales.
De momento, el Gobierno ha impuesto sanciones que suman 435.000 euros a Acciona, por sus incumplimientos del pliego actual.