Esta mañana han empezado a operar los nuevos trenes de la línea Zaragoza-Canfranc, en sustitución de los antiguos vehículos, conocidos como ‘tamagochis’, que dejarán de utilizarse en Aragón, salvo que fuese necesario recuperarlos ante incidencias puntuales. Los nuevos trenes son mucho más modernos y confortables, ya que disponen de climatización, puertas automáticas, dispositivos porta-bicicletas y 124 plazas de butacas reclinables.
Además, este modelo, serie 594, cuenta con espacio para personas con movilidad reducida y un aseo adaptado. El alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez, reconoce que la duración del trayecto seguirá siendo poco competitiva, pero celebra que los viajeros podrán disfrutar de la ruta con mayor comodidad.