Los trabajos se centran en reparar los marcos metálicos que sirven de soporte para los 450 grandes vidrios de uno de los iconos de la Expo, la Pasarela del Voluntariado. La consejera de infraestructuras, Patricia Cavero, ha señalado los trabajos consisten en eliminar el óxido que afecta a los soportes metálicos, cuyos perfiles se van a acondicionar, lijar y pintar.
Esta es la segunda intervención que se realiza en los últimos meses para recuperar el lustre de una construcción que cumple 15 años. En la primera fase se sustituyeron 34 cristales que se encontraban en mal estado, sobre todo por actos vandálicos. Incluso algunos habían caído al cauce del Ebro, por lo que el problema es no sólo estético, sino también de seguridad.
Cavero ha explicado que, aprovechando esta actuación, los módulos metálicos que se van a sustituir serán de distintos materiales que podrían ser más resistentes al óxido. La consejera ha rogado civismo a los ciudadanos para conservar este puente de 188 metros de longitud que cada día utilizan muchos zaragozanos para cruzar entre la Almozara y el Actur para trabajar o ir al colegio.