Hasta ahora, si encuentras sitio en la calle, en zona azul o naranja, aparcas y pagas por un determinado tiempo. Todos los vehículos pagan lo mismo ya que existe una tarifa. Hasta ahora era así en todos los lugares, pero empieza a ser tendencia a que no lo sea. En la localidad francesa de Lyon, por ejemplo, a partir de 2024, el aparcamiento estará basado en el tamaño del coche.
Mario Arnaldo, presidente Automovilistas Europeos Asociados, explica que el aparcamiento es escaso y cada vez se hace más necesario un uso equitativo del espacio. Los vehículos son cada vez más anchos y largos, lo que hace que se necesite más espacio para poder dejar el vehículo y las actuales plazas de parking resultan incómodas. Arnaldo recuerda cómo tan sólo A Coruña tiene regulado en sus ordenanzas el espacio que hay que dejar entre vehículos para no molestarse entre uno y otro.
Otra de las medidas que debería imponerse es la de, precisamente por estos argumentos, no señalizar las plazas de aparcamiento. Establecer estas tarifas por el espacio que se ocupa debería ser algo automático al identificar el vehículo a la hora de aparcar.
Arnaldo defiende que no sólo se debería establecer una nueva tributación sino también que el impuesto de circulación de las ciudades fuera también asociado a ese tamaño de los vehículos, como en algunos lugares se establece por la contaminación o color de pegatina que se designa a cada uno de los coches.