La pandemia ha tenido un impacto especialmente negativo entre la población extranjera que vive en Aragón. Su tasa de paro ha subido en tres puntos respecto a 2019 hasta situarse en el 22,60%, mientras que la de la población autóctona no llega al 10%. Sufren además especialmente la precariedad, ya que el 91% de los contratos que firmaron en 2020 fueron temporales, y de media, cobran un 45% menos aproximadamente. Se desprende del informe anual del sindicato Comisiones Obreras.
En Aragón viven actualmente 162.000 personas extranjeras, 10.000 menos que en 2009. De ahí que desmientan el mito del exceso de migración. Su llegada compensa el envejecimiento poblacional ya que casi el 74% tienen menos de 45 años, y contribuyen a mantener el estado de bienestar.En general, las mujeres y los inmigrantes extracomunitarios sufren especialmente la precariedad laboral. La secretaria de Política y Diálogo Social de CCOO Aragón, Marta Arjol, explica que pese a que solo el 12% de la población en Aragón es extranjera, casi la mitad de los nuevos parados proceden de otros países. De cada 10 empleos destruidos por la pandemia, 4,6 corresponden a extranjeros.