Cultura

Pedro Olloqui: "Goya era así porque era aragonés"

En la exposición “Goya. Del Museo al Palacio” se pueden disfrutar de 62 obras pictóricas, pero también de otros formatos como un busto de Francisco de Goya. Obras del pintor de Fuendetodos, pero también de otros autores que influyeron en su obra.

Lourdes Funes

Zaragoza |

El Palacio de la Aljafería acoge la muestra “Goya. Del Museo al Palacio”. Una exposición compuesta por 62 obras que se reparten en varias salas. Un espacio que nunca había acogido el trabajo de uno de los aragoneses más ilustres y que el director general de Cultura del Gobierno de Aragón. Pedro Olloqui, asegura que comparten ciertas similitudes al repasar tanto la historia del Palacio como la del pintor.

Olloqui pone de manifiesto los “diferentes Goyas” que se pueden ver en la exposición, desde obras muy luminosas, hasta retratos que parecen hablar, imágenes muy inquietantes e incluso terroríficas además de denunciar situaciones injustas. Una evolución que como indica el director general de Cultura solo fue posible porque Goya era aragonés. “Es lo que es porque es aragonés.

Una premisa que se va a poner de manifiesto en los preparativos del bicentenario del fallecimiento de Goya que tendrá a Aragón como sede, pero que pretende destacar el trabajo y la figura del pintor aragonés en ámbito nacional e internacional.

Del Museo al Palacio

Fernando Sarria, jefe del servicio de Archivos, Museos y Bibliotecas del Gobierno de Aragón, explica cómo el Museo de Zaragoza es el lugar en el que se encuentra una de las mayores colecciones de obras de Francisco de Goya y esta exposición es un lugar idóneo para mostrarlas mientras duran las obras del Museo y que no estén “guardando polvo”.

El traslado de las obras ha sido un trabajo muy complejo y minucioso ya que, a pesar de que, como indica Sarría, la distancia entre el Museo de Zaragoza y el Palacio de la Aljafería no es mucha, ha habido que proteger las obras con sumo cuidado con embalajes especiales para cada una de ellas.

Pero no sólo eso, para que fuera posible la exposición, una vez que los comisarios idearon y proyectaron el discurso expositivo, hubo que acondicionar las diferentes salas, por ejemplo, con climatización. Miriam Monterde, coordinadora técnica de la exposición, explica que al tratarse de un edificio histórico no se pueden tocar las paredes y hay que acondicionar diferentes elementos como una mesa en la que se ha colocado una vitrina para poder ver la colección de grabados de Goya.