Empezó en la radio musical. Fue una de las primeras estrellas de los 40 Principales y triunfó con el programa El Gran Musical. Durante un tiempo, triunfó en televisión, sobre todo con el programa 300 millones, del que está más satisfecho haciendo balance de su paso por la pequeña pantalla; aunque la tele, confiesa, nunca acabó de gustarle.
Reivindica el poder de la publicidad bien hecha, que le han convertido en el gran referente de los anuncios en directo. Cuenta, entre risas, que veinte años después, le paran por la calle al grito de "¡Pepe, purito!" o aún le cantan el anuncio de "el Talonario Bancohotel". Sobre el futuro de la radio no tiene dudas: el podcast no puede acabar con la radio en directo, aunque sí está cambiando la forma de escuchar la radio, cada vez más 'a la carta'.
En su libro recoge historias de su niñez en Padrón, sus comienzos en la radio, su amistad con Julio Iglesias o su relación con José Ramón de la Morena, con quien vuelve a tener una estupenda relación tras un roce hace años. Recuerda su paso por Zaragoza en programas especiales el año de la Recopa, aunque guarda con especial cariño un programa frente al Pilar, junto a Iñaki Gabilondo y Joaquín Prat.