En Zaragoza se ha presentado la primera fase del proyecto de regeneración paisajística y urbana del río Huerva, que contará con un presupuesto de 8 millones de euros. Las obras empezarán en el segundo semestre de este año y durarán siete meses, afectando a dos kilómetros y medio de recorrido en los tres tramos descubiertos del río. El proyecto saldrá en los próximos días a exposición pública.
La primera fase permitirá limpiar toda la zona, la creación de un tanque de tormentas en los antiguos viveros Sopesens o la renovación de los colectores. También se realizarán trabajos para estabilizar los muros, debido a la verticalidad del río, muy encajonado en el entorno urbano; y posteriormente, en una segunda fase, se crearán zonas ajardinadas o juegos infantiles. En total la rivera del Huerva será accesible a través de cinco caminos.
La alcaldesa, Natalia Chueca, celebra el apoyo institucional que hará posible este proyecto transformador, uno de los más importantes de los próximos años. Tras mucho tiempo dando la espalda al Huerva, se actuará para crear un entorno amable para los ciudadanos.
El proyecto del Huerva permitirá mejorar la calidad del agua, combatir las especies invasoras tanto de flora como de fauna para fomentar las autóctonas, además de mejorar la movilidad y crear un parque fluvial de referencia que contará con senderos o carriles bici.
Para ir ejecutando las fases, Zaragoza ha obtenido 5 millones de fondos europeos y el Gobierno aragonés pondrá unos 20 millones en los próximos años. Un proyecto también fruto del apoyo del Gobierno de España a través de la CHE y la Fundación Biodiversidad.
Trasvase del Ebro
En su primera intervención pública, el nuevo presidente de la CHE, Carlos Arrazola, ha asegurado que la Generalitat de Cataluña no ha solicitado formalmente trasvasar agua del Ebro hacia la zona del Priorato, en Tarragona.
Además, el organismo de Cuenca ha evitado pronunciarse sobre la intención de la Comunidad vecina de exigir la gestión de las cuencas que ahora son competencia de la Confederación del Ebro. En cualquier caso, asegura que eso deberá ser una decisión del Gobierno.
