La madre de Marian Celma, Florencia en la novela, fue una mujer maltratada que sufrió muchos golpes en la vida. Este relato es un homenaje pero también una denuncia a un grito mudo, una realidad que existía y todavía existe en el interior de muchas casas.
Es también la historia de Marian. Con ocho años perdió la audición por una negligencia médica. El 2019 le hicieron un implante coclear y a través de su obra quiere poner también de manifiesto cómo hay muchas barreras para las personas sordas, hipoacústicas o con implante coclear. Barreras que ponemos las propias personas al no entender ni tener empatía.
'Promesa cumplida. Silencios ocultos que se abren a la luz' comenzó a ser una realidad en 2018 y en 2020, fruto del confinamiento, ha sido autoeditado. Se presentará el 25 de junio en Zaragoza, pero el 6 de junio, Marian Celma estará en la Feria del Libro de Zaragoza firmando ejemplares en la caseta de la librería Albareda.