El año 2022 ha comenzado con un caída de las Bolsas mundiales debido a aspectos como la lenta recuperación económica de la crisis sanitaria del Covid-19, los problemas de Europa por la situación de Ucrania, la inflación de España o la subida de la luz y del gas. Una situación que a muchas personas que ven cómo está bajando la Bolsa les entra la “histeria financiera”.
Luis Ignacio Fernández Irigoyen, con OVB, recuerda que cuando se sienta a realizar una planificación específica para cada uno de sus clientes, se tiene en cuenta todas las situaciones a corto, medio y largo plazo, por lo que la caída de las Bolsas no tiene porque suponer un sufrimiento.
Mirando un poco atrás en el tiempo, de febrero a abril de 2020, con el confinamiento, las Bolsas mundiales bajaron un 30% de media y aún así ese año terminó con una rentabilidad anual positiva. Por ese motivo es importante contar con el asesoramiento de profesionales.
