José Jaime Castellón, alcalde de Villanueva de Sijena, no ocultaba su alegría por la resolución del Tribunal Supremo donde recuerda sigue pendiente el conflicto por las pinturas murales del monasterio cuyo falle espera que también sea favorable a los intereses aragoneses. También el abogado de Villanueva de Sijena, Jorge Español, mostraba su satisfacción por que la decisión del Supremo ratifique la propiedad aragonesa de las 95 obras de arte, confirmando los fallos del Juzgado y de la Audiencia de Huesca y poniendo fin a uno de los litigios de arte sacro más mediáticos. Sin duda el más importante al que se han enfrentado Aragón y Cataluña.
En contra de las pretensiones catalanas, el Supremo no da validez a los contratos de compraventa puesto que quien actuó como vendedora no era la propietaria de los bienes y por tanto los contratos son nulos. Con el fallo del alto tribunal desaparece la posibilidad de que las piezas, que fueron trasladadas al cenobio por orden judicial, puedan regresar al MNAC o al Museo de Lleida. Queda pendiente eso sí el retorno de las pinturas murales, cuyo pleito también depende de la decisión del Supremo. Español confía en que sigan el mismo camino y regresen al monasterio.