El grupo Schindler reducirá su número de trabajadores en 119 personas en las instalaciones del polígono Empresarium de Zaragoza. En ese centro de producción desempeñan su labor unos 400 empleados. La multinacional plantea estos despidos por razones productivas, tecnológicas y organizativas. Además, la demanda de ascensores ha disminuido en los últimos años en el sur de Europa, una tendencia que seguirá estable.
Desde el grupo también indican que las piezas y componentes que se ensamblan en esa factoría quedarán obsoletas en poco tiempo. La semana que viene, empresa y sindicatos empezarán a negociar el Expediente de Regulación de Empleo.
La responsable de Industria de CCOO en Aragón, Ana Sánchez, lamenta un nuevo caso de destrucción de empleo en este sector y critica “las formas” de la empresa. Cree que es una decisión precipitada que puede achacarse a posibles modificaciones de la Reforma Laboral.