Todos los pueblos que se abastecen del pantano de Cueva Foradada han recuperado el agua potable. El Gobierno de Aragón ha confirmado que se pueden levantar las restricciones tras cuatro meses que han supuesto todo un calvario para los ayuntamientos afectados en las comarcas del Bajo Martín y Andorra-Sierra de Arcos.
Los problemas comenzaron con la fuerte tormenta que cayó en el cauce alto del río Martín el pasado 2 de septiembre, cuando esa parte de la provincia de Teruel padecía una fuerte sequía. Las escasas reservas del pantano hicieron que el agua recogida generara una gran cantidad de lodo, provocando la aparición de trihalometanos, cuyos efectos han permanecido activos hasta hace unos días.
Urrea de Gaén ha sido el último pueblo en levantar las restricciones. Su alcaldesa, Silvia Blasco, cree que "es el momento de sentarse a analizar las causas de esta crisis para que situaciones como ésta no vuelvan a repetirse".
