Esas estructuras se levantaron en 1981 y durante más de cuarenta años han sido las protagonistas del paisaje de la zona. Su demolición ha generado 260.000 toneladas de escombros, y para garantizar la seguridad de los vecinos de la zona, en el operativo han participado más de doscientos profesionales, encargados de los trabajos de desmantelamiento. El director general de Endesa, Ignacio Montaner, ha explicado que era una actuación necesaria porque en el decreto de puesta en marcha de la central figuraba como condición principal que cuando dejara de funcionar habría que devolver el entorno a su estado original
Montaner también ha indicado que todavía quedan dos años y medio para concluir el desmantelamiento de las instalaciones, pero que ahora todos los esfuerzos se centran en el plan de acompañamiento presentado al concurso de adjudicación del Nudo Mudéjar, que se fallará el próximo otoño
Símbolo de la minería
Además de un día histórico, también es un día de sentimientos encontrados para los vecinos de Andorra, muchos de ellos ex trabajadores de la central térmica. Es el caso de José Alberto López, que actualmente ha pasado a formar parte de las brigadas encargadas del desmontaje, y que no tiene ninguna esperanza en los proyectos comprometidos. Uno de los empleados que pudo acogerse al plan de recolocaciones es Gustavo Mañas. Desde la Puebla de Segur, a más de 300 km de casa, para él hoy es un día de luto. El alcalde de Andorra, Antonio Amador, anima a sus vecinos a cerrar este capítulo y escribir el futuro del municipio basándose en otras alternativas
reacciones políticas
El presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, ve lógica la demolición de las chimeneas de la Central Térmica de Andorra, porque aunque algunos colectivos solicitaron mantenerlas, nadie ha hecho propuestas para costear el mantenimiento que conllevaría. Además, sigue pendiente la firma con el Gobierno de España del Convenio de Transición Justa. Lambán cree que se rubricará antes o después, pero valora que, mientras tanto, se anuncian proyectos importantes de futuro para Andorra con las inversiones anunciadas por Oxaquim.
Para el Partido Popular es un día triste porque se han demolido las históricas torres de Andorra sin que haya alternativas de empleo para la zona. El diputado del PP, Juan Carlos Gracia Suso, recuerda que el convenio de transición justa sigue pendiente de firma y que otros países europeos van a mantener operativas sus centrales térmicas hasta el año 2038.
Para VOX la desaparición del símbolo de la minería en Teruel supone un punto y final para una etapa del desarrollo industrial. El diputado de esta formación, Santiago Morón, cree que con estas medidas España pierde su soberanía energética y la comarca de Andorra numerosos puestos de trabajo.