Después de un año y medio de movilizaciones, empresa y trabajadores siguen sin acercar posturas para la firma de un convenio colectivo en el que las negociaciones están generando más distancia que acercamiento. Responsables de Avanza y Comité de Empresa sólo coinciden en señalar la falta de voluntad de la otra parte.
Ante la posibilidad de recurrir a un mediador externo, como en 2016, el presidente del comité, José Manuel Montañés, ha señalado que no es partidario y que la labor del SAMA debería ser suficiente. También ha recordado que la convocatoria de huelga en semanas alternas finaliza el 30 de junio. Si para esa fecha no han recibido una oferta que consideren "seria" por parte de la compañía, se estudiará una nuevo calendario con más horas de paros y sin 'descansos' de huelga semanales.
Montañés ha aprovechado para recordar que el objetivo de los trabajadores no es castigar a los usuarios, a pesar de las críticas por un formato de huelga que cambia los horarios cada día. Ha asegurado que si se ha tomado esta medida no ha sido para confundir a los ciudadanos, sino para evitar que los servicios mínimos recaigan siempre sobre las mismas líneas y los mismos conductores.
