Con el objetivo de cubrir las necesidades a las que no llegan las instituciones en el medio rural, sobre todo relacionadas con los niños pequeños y con las personas mayores, en el Jiloca surgió “Tribu Rural”. Un proyecto que ha contado con la implicación de los vecinos y de los ayuntamientos de Báguena y Burbáguena.
Sofía González explica que gracias a esa implicación y a una subvención del ADRI Jiloca-Gallocanta, se realizan talleres, cursos y actividades que alcanzan a más de 65 personas. Es un paso más que ayuda a que personas que quieran quedarse en su municipio puedan hacerlo.
El ejemplo es la propia Sofía. Ella decidió ir a vivir a Burbáguena porque ahí tenía guardería para su hija, pero cuando pasó al colegio es cuando se dieron cuenta de las necesidades que había: madrugadores, comedor, actividades extraescolares… Y así surgió Tribu Rural. El siguiente paso es realizar actividades para los adolescentes de estas localidades.