La medida se ha puesto en marcha ante la previsión de que empiecen a llegar a la ciudad numerosas familias ucranianas huyendo del conflicto bélico.
Los propietarios que tengan un piso disponible y quieran ponerlo en alquiler deberán comunicarlo en el teléfono de los Servicios Sociales municipales (978 61 99 26), quienes trasladarán el ofrecimiento a la Fundación Cepaim y Cruz Roja, que serán las encargadas de gestionar la acogida.
La concejal de servicios sociales, Nuria Tregón ha explicado que "los arrendatarios percibirán las cantidades acordadas con las organizaciones sociales, según el precio que marque el mercado".