El presidente de la UCA, José Ángel Oliván, piensa que, en la tormenta, alguien se equivocó a la hora de evaluar la alerta y se puso en riesgo la vida de muchos zaragozanos. Asegura que el Plan de Protección Civil se puso en marcha cuando las imágenes de personas subidas a los vehículos ya estaban circulando por Internet.
Afirma que había una doble alerta naranja y que se debería haber actuado al igual que en los casos de ola de calor. Ha denunciado que los ciudadanos que han sufrido daños en sus vehículos están teniendo dificultades debido a que los talleres están desbordados e incapacitados para atender tantos casos.
Defiende que va a haber un gran número de coches considerados siniestro total, y reclama al consistorio que habilite un lugar donde se puedan examinar los vehículos afectados. Además, lamenta que el Consorcio de Compensación de Seguros no se haya puesto en contacto con las organizaciones de consumidores.