Insisten en que al igual que han hecho en otras comunidades "las estaciones de esquí deberían estar abiertas". Para ello proponen la permeabilidad de los confinamientos provinciales y autonómico y que se permita la movilidad a las segundas residencias y a establecimientos hosteleros, mediante reservas y registros, condicionado a la situación sanitaria del municipio de origen y destino. Reclaman también adecuar las medidas de contención de la pandemia, horarios de cierre de actividad y aforos de hostelería y comercio al tamaño de los municipios y al nivel de incidencia del coronavirus. Y la apertura de las estaciones de esquí actualmente cerradas, condicionada a la apertura del confinamiento provincial en la comunidad autónoma. El alcalde de Sallent, Jesús Gericó, insistía en que está en juego el futuro de los valles y que ya no pueden esperar más. Si en las próximas horas no obtienen respuesta, los alcaldes irán este viernes al Pignatelli.
Asimismo solicitan inversiones estratégicas en las estaciones de esquí para mejorar su competitividad. Ayudas a autónomos y empresas análogas a las recibidas durante el confinamiento de primavera, que por las circunstancias actuales no han podido ejercer su actividad su actividad económica o que han visto mermada su facturación en un 70% o más. También solicitan la aplicación para todas las empresas del territorio de incentivos fiscales o cualquier otra medida que permita la supervivencia de las empresas y la creación y mantenimiento de los puestos de trabajo.
Argumentan también que la estacionalidad del sector no permite la aplicación de los ERTE como figura de protección de los trabajadores del territorio. Solicitan por ello la adaptación de esta figura o la creación de una nueva, aplicable a las empresas que no han podido iniciar su actividad o que se ven abocadas a la reducción de sus plantillas o al cierre.