El doctor José Luis Cubero, miembro de la Sociedad Española de Alergología, explica que una de las medidas que levan años recomendando para los alérgicos al polen es la utilización de mascarilla, ya que ejerce de filtro y permite que el polen no haya un contacto directo con las vías respiratorias.
Otras de las medidas son conducir con las ventanillas del coche cerradas, utilizar gafas de sol que también ejerzan de barrera y, recetado por un médico especialista, un spray nasal o antiestamínicos. Aunque también existen vacunas para casos muy concretos.
El polen de las gramíneas, del plátano de sombra, del olivo y cupresáceas son las más habituales en los próximos meses. Además, con la nieve y lluvias de comienzo de año se espera que este año sea prolijo en polen.