Los portavoces de VOX en varias Comunidades Autónomas han consensuado las líneas rojas que pondrán al Partido Popular en la negociación de los presupuestos en territorios como Aragón, donde rompieron su pacto de gobierno. Los de VOX defenderán que las cuentas refuercen la educación o la sanidad. Pedirán también combatir la “okupación” y el empadronamiento ilegal, o medidas de apoyo a la familia y la natalidad.
Para que la negociación de las cuentas regionales se inicie, el PP deberá revertir las medidas de VOX derogadas o congeladas tras su salida de los gobiernos. El portavoz de acción política de la formación, José Antonio Fúster, exige, además, un rechazo expreso a los repartos de inmigrantes del Gobierno de España y la puesta en marcha de planes de retorno de esas personas, en la medida que lo permitan las competencias autonómicas.
Fúster ha aclarado que el PP “no tiene garantizado el apoyo de VOX, pero sí su voluntad de negociar”. Y aunque se han fijado esas líneas de unidad de criterio a nivel estatal, no se perderán de vista las peculiaridades de cada territorio durante las negociaciones.
