El presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, se ha reunido con los líderes de Vox e Izquierda Unida, cerrando así su ronda de encuentros con los partidos de la oposición, para abordar la salida a esta crisis sanitaria. Ambas formaciones, de ideología contraria, coinciden sin embargo en sus críticas hacia la consejera de Sanidad. Izquierda Unida cree que haber pedido disculpas por sus declaraciones sobre los medios de protección no es suficiente y Vox exige que se ponga al frente de ese Departamento un nuevo equipo, capaz de dialogar con los profesionales sanitarios.
El líder de Vox en Aragón, Santiago Morón, cree que el Gobierno de España está usando esta crisis para avanzar en su agenda ideológica y confía en que se autorice la manifestación en coche que recorrería las calles de Zaragoza, como el resto de capitales, el 23 de mayo. Tras haber abandonado la Mesa técnica para la reconstrucción social y económica de Aragón, Morón le ha trasladado a Lambán su intención de reiniciar ese debate en una Comisión especial en las Cortes. Tendría una duración de un año e invitarían a participar en ella a agentes sociales.
El coordinador general de Izquierda Unida, Álvaro Sanz, propone que aprovechemos esta crisis para impulsar un nuevo modelo productivo, donde se refuercen los servicios esenciales y se apueste, incluso, por una empresa farmacéutica pública. Sanz plantea subir los impuestos a quienes más ganan, para incrementar las partidas de Atención Primaria, Educación o residencias de mayores. Además, le ha pedido a Lambán que modere sus mensajes sobre la desescalada y evite entrar "en esa absurda carrera" de las comunidades autónomas hacia la supuesta normalidad.