El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón se ha reunido con los sindicatos para negociar modificaciones del decreto de Sanidad que va a obligar a los médicos y enfermeras de Atención Primaria a trabajar hasta las 22 horas un día al mes y un festivo cada dos meses. El mismo decreto ha causado la dimisión en bloque de la dirección de Atención Primaria del Sector Zaragoza II.
La agrupación de sindicatos médicos CEMSATSE mantiene, de momento, la convocatoria de huelga de sanitarios de los días 24 y 31 de marzo. Además, los tutores MIR de todas las áreas sanitarias amenazan con dejar esta labor, a finales de este mes.
Desde los sindicatos médicos han calificado la reunión de innecesaria, pues la administración, explican, no ha presentado alternativas. Todos los sindicatos mantienen la misma postura, incluso los que votaron a favor de la iniciativa autonómica en Mesa Sectorial. Mañana, la DGA se va a reunir solo con CEMSATSE, para abordar la huelga.
El presidente del sindicato médico FASAMET, Leandro Catalán, responsabiliza a Sanidad de la falta de avances en la negociación, y afronta la reunión de mañana con la esperanza de modificar el 'decretazo': "Vamos con intención de avanzar y de buscar salidas a este conflicto. La administración debe reflexionar por qué ha habido esa respuesta tan contundente por parte de los profesionales de los equipos de Atención Primaria, y que analice las posibilidades de revertir esta situación".
En defensa de Bancalero
En plena polémica, la vicepresidenta del Gobierno aragonés, Mar Vaquero, ha respaldado la labor del consejero de Sanidad, José Luis Bancalero. Vaquero ha señalado que el consejero está volcado en mejorar la sanidad en un momento complicado por la falta de profesionales, y que escuchará las reivindicaciones de los médicos y enfermeras con el objetivo de mejorar la atención que reciben los ciudadanos.
