Lo que se pretende con esta campaña es animar a las empresas, autónomos y jóvenes empresarios a marcar una casilla que ayuda a implementar muchas políticas sociales del tercer sector. La casilla es una oportunidad sin coste alguno para las empresas que permite por ejemplo atajar problemas entre los mayores como la soledad no deseada, desarrollar programas para personas con discapacidad, para problemas de inclusión en la infancia o para cualquier otro tipo de necesidades socio sanitarias o educativas de las entidades del Tercer sector.
En el ejercicio anterior se recaudaron cerca de 12 millones en el Principado gracias a marcar esta casilla. Tienen hasta el 25 de julio para poder hacerlo los modelos 200 y 220 de la declaración del impuesto de sociedades, y además desde el tercer sector animan a las empresas a recoger su sello como empresa solidaria. A partir del 1 de agosto se abre el plazo para poder solicitarlo.
La campaña ha sido presentada en la sede de la Federación asturiana de empresarios por parte de la mesa del Tercer Sector y de la directora general de gestión de derechos sociales, Paula Álvarez.