Despedimos temporada cafetera con un verdadero hombre orquesta. Y lo digo en el mejor sentido de la expresión. Carlos Areces es actor, cómico, cantante y dibujante. Algunos le conocen de programas como La hora chanante o Museo Coconut.
Pero también ha participado en películas de grandes directores como Alex de la iglesia, en su Balada triste de trompeta. En este caso, su visita al Principado tiene una excusa musical. Ojete Calor, el grupo que comparte con el también cómico Aníbal Gómez, será una de las estrellas del cartel del festival Metropoli, este sábado, en Gijón.
Con él hemos hablado de su versatilidad a la hora de representar papeles (de todas las edades), de su obsesión por coleccionar obras que lleven la firma del desaparecido Francisco Ibáñez; de su santo grial (el que por cierto, "nunca le prestaría, por el riesgo a no ser devuelto, a Santiago Segura, pero sí a Alex de la Iglesia"); del género subnopop, con el que han bautizado a su estilo musical; o de lo poco que le gusta que le traten de usted: "El respeto siempre está por debajo del cariño".
También de cosas cochinas, de su excentricidades y de los mayores vicios de la vida: "Comer patatas fritas; practicar sexo de vez en cuando e ir al cine, a una primera sesión, sin mucha gente, con un bol de palomitas recién hechas".
Suscribo.
Bon appétit!