La principal novedad en este año es que todos los exámenes regresan, tras ejercicios marcados por la pandemia de la COVID-19, a sedes educativas, bien en aulas universitarias o en institutos de enseñanza secundaria (IES) allí donde no hay sede universitaria.
El número de alumnos que se examinan es inferior al año anterior, cuando se inscribieron 4.829 estudiantes. Las pruebas se llevarán a cabo en 17 ubicaciones, situadas en Oviedo, Gijón, Avilés, Mieres, Langreo, Ribadesella, Cangas del Narcea, Luarca y Tapia de Casariego. La convocatoria de julio tendrá lugar entre los días 6 y 8.
Las sedes estarán en el Campus de Humanidades, la Facultad de Economía y Empresa, la Facultad de Economía y Empresa, y la Facultad de Derecho (Oviedo); el aulario sur, norte y edificio polivalente de la EPI Gijón; el IES número 4, el Ramón Menéndez Pidal y el Carreño Miranda, en Avilés; el campus de Mieres; el IES Jerónimo González de Sama de Langreo; el IES Avelina Cerra de Ribadesella; el IES de Cangas del Narcea; el IES Marqués de Casariego en Tapia; y el IES Carmen y Severo Ochoa, en Luarca.
Los estudiantes de Bachillerato deberán examinarse de las cuatro asignaturas, que constituyen la fase de acceso, cursadas en segundo de Bachillerato según la modalidad e itinerario realizado.
Cada ejercicio de la fase de acceso se calificará de 0 a 10 puntos. La calificación de esta fase será la media aritmética de las calificaciones obtenidas en cada una de las materias, expresada en una escala de 0 a 10 puntos con tres cifras decimales y redondeada a la milésima. Esta calificación deberá ser igual o superior a 4 puntos para hacer media con la calificación final del bachillerato.
La nota de la EBAU se calculará en base a un 60% de la calificación final del Bachillerato (NMB) y un 40% de la calificación de la fase de acceso de la prueba (CFA). Se entenderá que un estudiante reúne los requisitos de acceso cuando el resultado de esta fórmula sea igual o superior a 5 puntos. La nota máxima en esta fase es de 10 puntos.
Aquellos estudiantes que quieran subir nota para acceder a sus estudios universitarios deberán presentarse además a la fase de admisión. Consistirá en la evaluación de las materias de opción del bloque de asignaturas troncales de segundo curso de Bachillerato. Las materias de esta fase no requieren haber sido cursadas en el bachillerato para ser evaluadas en la prueba y los estudiantes se podrán examinar de un máximo de 4 asignaturas. La nota final una vez realizadas ambas fases (acceso y admisión) alcanzará un máximo de 14 puntos.
La consejera de Educación, Lydia Espina, ha insistido en que la flexibilidad que incluyen las pruebas este año no supone que se baje el nivel de exigencia. "No es una EBAU más fácil para nada", ha dicho.
Ha lamentado que en ocasiones haya quien "simplifique discursos" en torno a esta cuestión y ha comentado que "que se flexibilicen las cosas no significa que se hagan más fáciles". Espina ha dicho que los alumnos que se presentan hoy en día están igual de preparados que los que lo hicieron hace años.
