La consejera de Educación, Lydia Espina, se ha reunido con las directoras de los tres colegios afectados y, en rueda de prensa en Oviedo, ha anunciado que se ha seleccionado La Escuelona y El Llano por su cercanía al centro afectado y porque tienen aulas disponibles de las mismas etapas educativas.
La Escuelona está a 700 metros del centro que sufrió el derrumbe y el Llano a 1,1 kilómetros. Además, las familias con niños en los dos centros tendrán un transito entre los dos centros de seis minutos. Los que vayan a La Escuelona entrarán a las clases a las 9.10 horas, mientras que el resto lo hará a las 9.00 horas.
Será el martes cuando se reaunuden las clases, porque el lunes se dedicará a organizar los materiales y a los equipos docentes. Además, la Consejería va a tomar medidas como reforzar la plantilla del Rey Pelayo para facilitar el transito, va a garantizar el servicio de comedor a los alumnos y reforzará los gastos de funcionamiento en los tres centros. Se hará cargo del material escolar afectado por el hundimiento.
La consejera ha agradecido la "colaboración" y "disposición" de la comunidad educativa y la "ayuda" efectuada desde el Ayuntamiento de Gijón. Sobre los informes técnicos relativos al derrumbe, pide "dejar a los técnicos trabajar" y asegura que "estamos a la espera". "La prioridad es escolarizar al alumnado afectado y en 24 horas hemos dado una respuesta".