Desde hoy la Comisión de Salud Pública ha determinado que solo deban hacer cuarentenas las personas que se contagien de manera grave o pertenezcan a un grupo de riesgo. Si se es asintomático o un caso leve, se podrá hacer vida relativamente normal, extremando las precauciones. La nueva estrategia de control de la COVID se centra en los casos graves y en los grupos vulnerables, incluidos los mayores de 60 años. Solo se hará una PCR a personas de este ámbito que presenten síntomas compatibles.
El asesor del Gobierno del Principado, López Acuña, cree que no es una buena idea y "nos estamos adelantando", porque no estamos en la situación epidemiológica para tomar decisiones como esta. Pone el acento en las cuarentenas. Hacerlas desaparecer hará que "tardemos en apreciar" la presencia de la enfermedad.El epidemiólogo cree que es un error pensar que una persona con pocos síntomas no vaya a contagiar. Resalta que al dejar de hacer pruebas diagnósticas "dejamos de identificar los posibles positivos".
"Yo mantendría el aislamiento de los positivos, aún siendo leves. Y no bajaría la guardia de las pruebas diagnósticas".
