Otra victoria en El Molinón, solvente y convincente, mete de nuevo al Sporting de Albés en puestos de play-off. Tras el amargo debut liguero frente al Levante (con derrota quizás inmerecida) y el empate injusto frente al Eldense, los rojiblancos han enlazado cuatro triunfos seguidos ante sus aficionados y frente a buenos rivales: Oviedo, Zaragoza, Castellón y ayer Huesca. El mérito de la quinta plaza actual del Sporting es mayor si tenemos en cuenta que ya ha jugado ante 9 de los 12 primeros clasificados: sólo le resta Granada y Mirandés.
El Sporting encarriló el partido muy pronto, con el primer gol de Caicedo a los cinco minutos. El ecuatoriano, en boca de gol, mandó a la red un disparo mordido de Olaetxea. Ese tanto dio mucha tranquilidad al equipo, que tuvo ocasiones para hacer el segundo ante un rival muy desdibujado. La tónica no varió en el segundo tiempo, ni siquiera después de los cambios de Albés para darle frescura al equipo. El segundo lo anotó Gaspar, tras gran asistencia de Nacho Méndez que despachó un partido sobresaliente. Róber Pier, en un mal despeje, le dio vida al Huesca, pero el equipo de Hidalgo apenas tuvo más acercamientos y ahí Yáñez mostró mucha seguridad.
El Sporting jugará el domingo en el Carlos Belmonte, en lo que supondrá el regreso a la que fue su casa para Albés, Olaetxea y Dubasin. Cote estará disponible tras cumplir un partido de sanción, y se mantendrán como baja Curbelo y Bernal. Después, el miércoles, llegará la Copa con viaje a Soria.
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