ESCUELA DE HOSTELERÍA Y TURISMO

Jóvenes que quieren "mimar" a asturianos y visitantes

Del centro integrado de FP de hostelería y turismo de Gijón han salido graduados este curso 81 jóvenes. Ahora les toca el periodo de prácticas, pero han recibido una sólida formación en dos sectores llamados a ser claves en el futuro de Asturias. En representación de todos ellos nos han contado su experiencia cuatro de los recién graduados.

Guillermo Figueroa

Gijón |

José Miguel García Parrondo acaba de terminar el grado medio de Cocina y Gastronomía. Isabel Mesones Toledo ha hecho lo propio en el grado superior de Dirección de servicios en Restauración. Por la parte de turismo recibimos a Yaiza Meana Artidiello, del grado superior de Gestión de Alojamientos Turísticos y a Anginey Sánchez, del grado superior de Agencias de Viajes y Gestión de Eventos.

Los jóvenes que apuestan por esta formación profesional han recibido conocimientos en muchos ámbitos. Porque aunque su especialización les lleve por uno u otro camino, es importante que sepan todo lo que sucede en un hotel, un alojamiento o un restaurante por ejemplo. El objetivo final es ofrecer el mejor servicio posible. Que quien los reciba se marche satisfecho. Ahora inician las prácticas y notan que las empresas les están esperando. Son profesiones son muy buena salida laboral, y eso se nota. Pero son conscientes de que empieza lo bueno. De la teoría a la práctica hay un trecho...

No todo es la formación universitaria, añaden. En algunos casos, como el de Yaiza, probó la Universidad, pero no le convenció y encontró en la FP su sitio. No es la única. Para todos ellos, formarse en estos campos era importante (no es algo que pueda hacer cualquiera por mucho internet y por mucho que algunos lo piensen) porque tenían claro que era lo que les gustaba. Por eso, aunque es duro y se dedican muchas horas, nos cuenta José Miguel, trabajan en lo que les gusta.

Un aspecto desconocido de esta formación profesional es la posibilidad de hacer las prácticas en empresas del extranjero. Isabel se va a la Bretaña francesa (quiere ampliar su manejo de idiomas porque quiere dedicarse a la hostelería "de lujo", no "de batalla") y Yaiza a Costa Rica. José Miguel y Anginey han preferido quedarse en Gijón.