ACEPTARSE PARA SER IMPARABLE

Paul Montiel: el hombre de titanio

La historia de Paul tiene tantos capítulos que un rato de radio se quedan cortos. Su vida cambió cuando un accidente de coche en su Venezuela natal le dejó sin una pierna. Mala suerte. O buena. Por qué, nos lo ha explicado.

Guillermo Figueroa

Gijón | 13.05.2024 13:02

Aunque Paul ha sido un ejemplo de superación durante muchas etapas de su vida, tampoco ha sido siempre así. Porque ha tomado decisiones equivocadas durante muchos momentos de su vida. Alcohol, drogas, intentos de suicidio...Es una persona "sin grises". O es blanco o es negro.

Cuando perdió la pierna pasó una etapa de negación donde el dinero se escapaba. En los tratamientos. Y en las malas decisiones. Logró superarlo y gozar de una vida diferente, pero entonces su particular pierna de titanio se convirtió en un icono de las protestas contra el gobierno de Maduro en Venezuela. Y eso fue un problema. La fama, el ego, le jugó una mala pasada y aunque conocía el infierno hacia el que se encaminaba volvió a beber, a perderse, a dejar de ser un ejemplo para lo bueno y regresar al ejemplo del error. Lo blanco tornó de nuevo en negro.

Le costó salir. Su familia marcó distancias, y por primera vez, un guerrero como él decidió dejar de luchar. Solo quería irse. Vivió durante meses en las calles de Madrid esperando ese momento, pero tomó una decisión que cambiaría su vida. Venir a Asturias para despedirse de sus hijos (su madre tiene raíces asturianas y se vinieron a vivir aquí). No era consciente del daño que les estaba causando por estar así. Más adelante sí. Cuando se aceptó sí. Pero por aquel entonces fue la apuesta incondicional que hicieron otros por él lo que le hizo sacar la cabeza. Buscar ayuda. Encontrar a Proyecto Hombre. La pandemia.

Paul nos recuerda que es complicado saber perdonarse y aceptarse. Pero cuando se logra tenemos la oportunidad de ser felices. Y él lo es. Su secreto es vivir el presente sin dejar que el pasado nos domine. Aunque tengamos malos días, hay razones de sobra para continuar y evitar la recaída. Es el secreto de los HÉROES SIN CAPA.

Ahora vuelve a ser el guerrero. El ejemplo. La pierna de titanio que le recuerda su historia. Compite por representar a España en los Juegos Paralímpicos de París en remo. Da conferencias. Ayuda a otros.