Veinteañero, trapichero, facineroso y ladroncete (entre otras cosas), Antonio no es de fiar pero atrae a todo el mundo como la luz a las polillas. Tal vez por eso su vida es ir de lío en lío, de cama en cama, de bronca en bronca, buscando un lugar, un objeto, una persona o una experiencia que doten de sentido a su errática existencia. Un viaje al más puro noir contemporáneo. Un viaje al más puro noir contemporáneo que logró conquistar ex aequo el Gran Premio en el último BAFICI.