La presidenta vecinal, Mapi Quintana, reconoce que el barrio va mejorando algo, pero recuerda al Ayuntamiento que quieren atención. Su principal preocupación es la contaminación. Desde santa Bárbara ven las chimeneas de Arcelor, y, advierte, lo que sufre la zona oeste acaba llegando a todo el concejo.
Quintana recuerda además que llevan muchos años conviviendo con un desagradable vertedero ilegal para el que piden una solución.
Los vecinos de Santa Bárbara reclaman además a los políticos no perder la conexión de transporte público que tanto les costó conseguir o que se busquen medidas que eviten ver a vehículos circulando a gran velocidad por el barrio.
Santa Bárbara mira además con optimismo al futuro porque se convertirán en la primera comunidad solar de Gijón.