La alcaldesa ha afirmado no obstante que siempre defendió la propuesta que elaboró el anterior equipo de gobierno. "Nunca se retiró", dice, aunque desde que se puso a trabajar en el asunto entendió que debía empezar a "controlar la frustración" que podía generar la decisión, como finalmente ocurrió, de no ser elegida Gijón como sede del Grado.
En la propuesta presentada por el Ayuntamiento se ofrecían instalaciones del Patronato Deportivo que, dice la alcaldesa, son utilizadas por algo más de 4.000 personas. Los horarios en los que quedaban libres eran muy escasos, y de tener el Grado sería necesario decirles a los usuarios que no podrían seguir acudiendo a hacer deporte. También eran necesarios espacios para dar clase y laboratorios con los que la ciudad no cuenta actualmente, añade. A ello se une que en la propuesta se daba por hecho que estaría finalizada una residencia de estudiantes que, a día de hoy, ni siquiera está en proyecto. Ana González ha querido recordar además que en la Junta General se apoyó a Mieres.
La oposición ha reprochado en general a la alcaldesa que no expresase su descontento con la decisión de llevar el Grado de Deportes a Oviedo. Foro, que elaboró la propuesta, cree que el Psoe nunca estuvo interesado de que se impartiese en Gijón. El PP no entiende que se generasen unas expectativas altas en la población y no se informase de todas las complicaciones de las que ahora habla la alcaldesa. Ana González se ofrece a pelear por el Grado, pero insta a los partidos a decir cómo quieren que lo haga.
Desde el equipo de gobierno se añade que poner en marcha el Grado de Deportes en la ciudad supondría una inversión de 10.5 millones de euros y cree que la estrategia presentada por la Universidad es interesante para Gijón aunque no incluya dichos estudios. Entienden que lo importante es aprovechar el potencial que tiene Gijón.