Ha sido una madrugada de fuerte viento en la comarca, lo que ha ocasionado de nuevo algunos desperfectos y sustos como el que tuvo lugar en Infiesto. En el paseo del Sol se fueron abajo dos grandes árboles, empujados por el aire y seguramente por unas raíces débiles. Los ejemplares, de considerables dimensiones, llegaron a impactar contra la calle García Carbajal, en la otra orilla del Piloña.
La combinación de lluvia intensa y viento ha favorecido en los últimos días la caída de grandes árboles en toda la comarca. Parece ser que aún restan varias jornadas más de tiempo inestable y ríos caudalosos.
A partir del domingo la situación podría ir cambiando y los cielos se volverán a despejar.