El Ayuntamiento de Llanes ha decidido clausurar el aparcamiento de La Talá y calles adyacentes que venía siendo utilizado por autocaravanistas tras comprobar que no cumplen la normativa vigente y tienen un comportamiento incívico: orinando, defecando o vertiendo sus residuos cerca de las autocaravanas. El viernes pasado se les requirió para que cumplieran con los requisitos establecidos.
Esta actitud ha provocado además numerosas quejas tanto de vecinos que residen cerca como de la opinión pública en general, que rechaza este tipo de concentraciones sin respetar las más elementales medidas de convivencia y salubridad.
La Policía Local ha instalado en La Talá señales informativas advirtiendo a los interesados de que disponen de un plazo de 48 horas para abandonar el lugar por cierre del aparcamiento. Esto es, el domingo por la tarde quedará prohibido ocupar cualquiera de las 60 plazas creadas en este estacionamiento, que será clausurado.
No obstante, permanecerá abierta en el mismo sitio el área destinada expresamente a autocaravanas, que cuenta con 19 plazas. Además, se informa que en los ocho campings existentes en el concejo hay más de 400 plazas para autocaravanas.
La semana pasada, por idénticas razones, el Consistorio llanisco optaba por cerrar al tráfico rodado los accesos al Alto de Torimbia y Alto de La Boriza, en el mirador entre las playas de Ballota y Andrín; para impedir el paso a las autocaravanas, camper y furgonetas que ocupan estos lugares, acampan estando prohibido y que ensucian el entorno.