El Presidente del Principado pidió la unidad de la Junta General del Principado contra el ministerio de transportes por el engaño con los trenes de cercanías. El portavoz de Foro Adrián le mostró el apoyo, pero le echó en cara que no presentase el documento de la declaración institucional en la Junta General y le preguntó hasta donde quiere llegar con las dimisiones.
Adrián Barbón prefiere escuchar primero a la ministra Raquel Sánchez antes de pedir su cabeza o no y tiene claro que no pedirá la dimisión de la secretaria de Estado de Transportes, porque Isabel Pardo de Vera es la mejor aliada de Asturias tanto en la Variante de Pajares como en el Corredor Atlántico. Barbón considera que el PP quiere el cese de Pardo de Vera porque culpó a Cascos de dos años de retraso en la llegada del AVE y lo convirtió en un referente después de haberlo expulsado.
El Presidente reclamará nuevos plazos de entrega de los nuevos trenes y compensaciones. Adrián Barbón no está dispuesto a llevarse por delante la autonomía por asumir las competencias en materia ferroviaria, toda vez que las mejoras de la red precisan una inversión cercana a los 1.500 millones antes de sentarse a negociar el traspaso.
Podemos reclamó al Presidente que asuma las competencias ferroviarias porque las soluciones no van a venir de fuera. Rafael Palacios dijo que el eje Mediterráneo - Cantábrico se está desarrollando hacia el País Vasco y Asturias no puede quedar fuera, pidiendo al Presidente que reclame mayor protagonismo tras la tormenta perfecta de los trenes.
Adrián Barbón negó que fuese condescendiente tras sentirse defraudado y engañado, de ahí la beligerancia contra su propio gobierno ante este bochorno. El Presidente del Principado dice que se siente libre para defender Asturias y oponerse a su propio gobierno de la nación. El lunes se reunirá con su homólogo cántabro, Miguel Ángel Revilla.
